Pasos para desbloquear una conversación.

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En la última entrada (¿Qué hace que una conversación funcione?) vimos juntos que las conversaciones dejan de funcionar cuando deja de haber escucha. Vimos que en un conflicto resulta muy difícil tener una buena conversación porque las dos partes están desesperadas por encontrar una escucha que no le proporciona el otro. También vimos la situación era como un atasco en un cruce entre dos calles. Los dos quieren pasar al mismo tiempo (las dos partes quieren recibir escucha) pero la urgencia es tan grande que se atascan por esta urgencia de ser escuchados.

¿Cómo se soluciona o se previenen un atasco en un cruce de calles? Una de las formas que más se utilizan es mediante un semáforo que regula el tiempo que tiene cada parte para pasar. ¿Podríamos aplicar un sistema similar en una conversación conflictiva? Sí y no, me explico. Por una parte sí, porque así damos un cierto tiempo a cada parte para que tenga la oportunidad de hablar. por otra lado no, porque eso no asegura que las dos partes se escuchen. Hace falta algo más para restablecer la conexión y la escucha. Veamos una forma de hacerlo.

Método para desbloquear una conversación

Si eres tú mismo el que está en una conversación conflictiva entonces lo más probable es que tú estés necesitando mucha escucha y no la estés recibiendo, así que lo primero es darte cuenta que es normal y lógico que no puedas y no estés dispuesto a escuchar a la otra parte. Lo que quiero decir con esto es que creo que es muy difícil que alguien pueda escuchar a otra persona cuando está emocionalmente afectada, si antes no recibe la escucha que necesita. Creo que es imposible dar algo que no tenemos, así que, si nos falta escucha nos será muy difícil poder darla a los demás.

Por lo tanto, antes de intentar una conversación para rehacer puentes te recomendaría que te escuches o que alguien te ayude y te acompañe dándote empatía, de forma que puedas descubrir y reconocer cuales son las necesidades y los valores universales que te están faltando en esa situación. Fíjate que te digo escucha empática, para diferenciarlo de la escucha con simpatía, en la que la otra parte nos escucha y nos consuela dándonos la razón sobre la situación. En la escucha empática se escucha a un nivel más profundo y se acompaña a la persona para que pueda reconocer los valores y las necesidades universales que hacen que esa situación sea dolorosa. Porque las necesidades y valores universales no necesitan ser satisfechos sino ser reconocidos. (Escuchar con simpatía o empatía.)

Sólo cuando tú hayas recibido suficiente escucha podrás acercarte a la otra persona y hacerte la siguiente pregunta: ¿estoy dispuesto a escuchar de forma profunda a la otra persona, como un primer paso para luego poder expresarme y que pedir ser escuchado? Hay que ser muy honesto contestando esta pregunta. Si aparece algo así como ¿y a mi quien me escucha? entonces significa que todavía estás necesitando más escucha y que no podrás escuchar de forma auténtica y profunda a la otra persona. Así que es preferible no avanzar en el proceso hasta que tú no hayas recibido la escucha que necesitas.

Date cuenta que lo que estoy proponiéndote es aplicar el mismo principio para ti, que para la otra persona: sólo puedes escuchar si antes te han escuchado. Así que si quieres  llevar la iniciativa de desbloquear la situación entonces te sugiero que empieces escuchándote a ti mismo primero, para que así puedas escuchar de forma profunda a la otra persona. Ése es el orden más adecuado, primero recibe para que puedas dar. De esta forma, las probabilidades que esa persona te escuche aumentarán porque, al haberle proporcionado tú la escucha que necesita, él se abrirá a la posibilidad de escucharte a ti también.

Ya sé que para recibir la escucha de la otra persona parece un camino de muchas vueltas. Sin embargo yo creo que muchas veces, en las relaciones interpersonales, el camino más rápido no siempre es la línea recta.

Después de todo esto creo que vale la pena hacer un pequeño resumen de los pasos que hemos seguido para desbloquear una conversación conflictiva.

Resumen de Los pasos

Paso 1. Darme cuenta que estoy en una conversación bloqueada porque yo necesito escucha.
Paso 2. Preguntarme ¿Quiero salir de sea situación de bloqueo y estoy comprometido en ello?

Si la respuesta es afirmativa

Paso 3. Empezar por uno mismo. Escucharme o pedir ayuda para que alguien me escuche de forma profunda y empática. Quedarme en este paso hasta que haya recibido la escucha suficiente. La manera de saber si ya estoy satisfecho es que puedo contestar honestamente que si la la pregunta ¿Estoy dispuesto a escuchar de forma profunda y empática a la otra parte?
Paso 4. Escuchar de forma empática a la otra parte.
Paso 5. Pedir a la otra parte si quiere escucharnos (por fin….)

Con estos pasos conseguirás recuperar la conexión porque poco a poco recuperaréis la confianza y el respeto mutuo, lo que aumenta las posibilidades de que puedas llegar a un acuerdo que sea satisfactorio para ambas partes.

Conclusiones

Para acabar quisiera comentarte alguna cosa más. La primera es que quiero ser honesto y decirte que estos pasos no son una garantía para conseguir desbloquear un diálogo conflictivo, porque no es posible obligar a las personas a que nos escuchen. Lo que sí está en nuestras manos es preparar las mejores condiciones posibles para que pueda suceder y celebrar cuando eso ocurra y este método es la mejor manera que yo conozco.

También quiero decirte que mientras una conversación esta discurriendo, es muy difícil hacer este proceso que te propongo porque se necesita un tiempo que en la conversación puede que no se tenga. Lo que se puede hacer cuando uno se da cuenta que está en una conversación bloqueada es pedir al interlocutor tiempo para continuar la conversación más adelante y poder prepararse. Por ejemplo, se me ocurre que se podría decir:

– Me da la impresión que esta conversación no está funcionando porque yo estoy necesitando escucha y creo que tu también estás necesitando lo mismo y ninguno de los dos lo recibe, ¿Qué te parece esto que te estoy diciendo?

Si la conversación ha llegado más lejos y los ánimos andan muy encendidos, una alternativa podría ser expresar de forma honesta que estamos sobrepasados. Podría ser algo así como:

– En este momento estoy desesperado porque tengo la sensación que no me escuchas y así me cuesta muchísimo poder escucharte y para mi es muy valiosa la escucha mutua en una conversación. Así que te propongo continuar la conversación más tarde, cuando yo esté más calmado. ¿Qué te parece?

También decirte que si la situación es emocionalmente muy intensa este trabajo puede ser excesivo para que lo haga uno mismo sin la ayuda de nadie. Así que una opción es pedir la ayuda a un mediador. Particularmente creo que la CNV proporciona unas herramientas muy poderosas para estas situaciones.

Para acabar, quisiera comentarte que los ejemplos de los diálogos que pongo son mi forma de ilustrar las situaciones. No me gustaría que los tomes como una receta sobre lo que es conveniente decir porque sólo es una forma de expresarse de forma honesta y que seguramente tu no lo harías de la misma forma que yo. Así que lo importante, más que la forma concreta de expresarse, es que lo hagas con la energía y la intención de conectar y eso va mucho más allá de las palabras.

¡Buen viaje!

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